El lunes pasado tuve la oportunidad de ver "Sin retorno", opera prima de Miguel Cohan, protagonizada por Leonardo Sbaraglia, Martín Slipak y Federico Luppi.
La película cuenta la historia de un hombre común, que tiene un accidente, mata a una persona, y decide escapar y ocultarlo.
A raíz de esta situación, el personaje de Leonardo Sbaraglia, un hombre que tiene una familia y trabaja como humorista, es acusado de este hecho, y es ahí donde se empieza a desatar la "acción".
Los dos protagonistas, y el padre de la víctima, atravesarán diversas situaciones, y tendrán que hacerse cargo de las decisiones que para bien o para mal han tomado.
"Sin retorno" es una película para quedarse pensando, para reflexionar acerca de las decisiones que tomamos, por la simple razón de que puede suceder en la vida real.
La película cuenta la historia de un hombre común, que tiene un accidente, mata a una persona, y decide escapar y ocultarlo.
A raíz de esta situación, el personaje de Leonardo Sbaraglia, un hombre que tiene una familia y trabaja como humorista, es acusado de este hecho, y es ahí donde se empieza a desatar la "acción".
Los dos protagonistas, y el padre de la víctima, atravesarán diversas situaciones, y tendrán que hacerse cargo de las decisiones que para bien o para mal han tomado.
"Sin retorno" es una película para quedarse pensando, para reflexionar acerca de las decisiones que tomamos, por la simple razón de que puede suceder en la vida real.
La peli es muy buena, está bien dirigida y tiene un guión sólido. Sbaraglia interpreta una transformación grande en su personaje de forma natural, pero el mayor peso de la película cae sobre Martín Slipak, que hace un trabajo excelente.
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